domingo, octubre 17, 2010

El nazi "Arbeit match frei", actualizado

de Tmartinez Martinez, el Domingo, 17 de octubre de 2010 a las 12:30
Entrada al campo de Auschwitz-Birkenau, tras la liberación
"Arbeit match frei" ("el trabajo nos hace libres"), el lema que daba a la bienvenida a los campos de concentración y exterminio nazis, vibra en la misma cínica frecuencia que el "Trabajar más, cobrar menos" de Díaz Ferrán como fórmula para salir de la crisis.
De ahí a la "modesta proposición" de Jonathan Swift de que los obreros se coman a sus hijos para no pasar hambre va tan poca distancia como de la "lideresa" Aguirre al Tea Party, o lo que es lo mismo, a una sociedad sin leyes, sólo con dios y amo.
Naturalmente, esto no se me ha ocurrido a mí solo; la fuente de inspiración es el artículo de Alejandro V. García que publica hoy en "Diario de Cádiz" (http://www.diariodecadiz.es/article/opinion/813664/una/modesta/proposicion.html):

JONATHAN Swift propuso en un célebre (y modesto) panfleto dirigido a la nación irlandesa que las familias pobres se comieran a sus hijos para que no llegaran a convertirse en una carga para sus padres. Aunque nuestros avatares económicos son casi iguales a los de la Irlanda en el siglo XVIII no creo que, por el momento, sea menester recurrir a ninguna forma de canibalismo fraterno. Esta es mi modesta proposición para reformar el mercado. Eliminar los contratos de trabajado indefinidos y proclamar la precariedad como un derecho innato. Por convicción liberal, el despido será siempre libre. Las empresas lucirán en su frontispicio la frase del presidente de la CEOE, Díaz Ferrán: "Más trabajo, menos sueldo". El rigor mortis será la única prueba admitida para la jubilación, lo que llevará aparejado una subvención para coronas y recordatorios. Los sindicatos, al paredón. Se eliminan los sueldos a los políticos y, por tanto, los políticos mismos. Se suprimen los gastos electorales y las elecciones. Desaparecen los traductores del Senado, los ujieres, los ordenanzas, los escribanos y el propio Senado. Se disuelve el Congreso. Las comunidades autónomas aplicarán el mismo método hasta reducir al absurdo el Estado de las autonomías. A partir de aquí, las familias pobres estarán autorizadas comerse a los hijos (y a sus amigos, vecinos y enemigos).                                                                                                                                           

1 comentario:

Pilar dijo...

MUY bueno, amigo, lo paso por facebook, a la pimienta poco hecho.
Besico y abrazo en revoltijo